5 de febrero de 2009

Análisis de Jauja


Cumpliendo con lo prometido. Tarde pero seguro. Acá colocamos nuestro humilde trabajo, que seguramente no tendrá toda la verdad, pero si una parte de ella.


Quisiéramos comenzar antes que nada con una pequeña biografía:

Leonardo Luis Castellani Contepomi nace en Reconquista, (Santa Fe, Argentina) el 16 de noviembre de 1899. Es ordenado sacerdote (1931), y estudia Filosofía y Teología en la Gregoriana de Roma, Después estudia Psicología en la Sorbona de París.[1] En Roma alcanza un grado inigualable: el Papa Pío XI, acredita con su firma, que Leonardo Luis Castellani es Doctor Sacro Universal (cum licentia ubique docendi), que su título lo habilita a enseñar Filosofía y Teología, aquí, como en Inglaterra, la China o el Japón, sin reválida. El mismo le da derecho a publicar sus escritos sin censura previa, en los países donde no hubiese otro título igual o superior al suyo. Superior, no existe; igual, nadie lo tenía en la Iglesia desde el descubrimiento de América hasta él[2].

Desde su regreso a Europa y hasta 1946 trabaja en docencia y periodismo. Estas actividades y sus actitudes críticas hacia la educación y las estructuras sociales, políticas y religiosas comienzan a ocasionarle enemigos y dificultades. En 1967 funda la revista Jauja, que dirige hasta su cierre, en 1969.

Profesa una gran devoción por el filósofo luterano Soren Kierkegaard, a quien dedica 'De Kierkegord a Tomas de Aquino', uno de los principales libros de la última etapa de su vida. Muere el 15 de marzo de 1981 en Buenos Aires[3], habiendo escrito sobre teología, literatura, psicología, educación, etc.

Jauja:

Estructura formal: Vemos que se compone de diez estrofas (más una que sería la oración) con ocho versos cada una:

"Yo salí de mis puertos tres esquifes a vela (1)

Y a remo a la procura de la Isla Afortunada (2)

Que son trescientas islas, mas la flor de canela (3)

De todas es la incógnita que denominan Jauja (4)

Hirsuta, impervia al paso de toda carabela (5)

La cedió el Rey de Rodas a su primo el de León (6)

Solo se aborda al precio de naufragio y procela (7)

Y no la hallaron Vasco de Gama ni Colón." (8)

A su vez cada uno de estos versos tiene catorce sílabas. Recordar las reglas de la métrica: Unir las sílabas de las palabras que empiezan y terminan con vocal (cuando el poeta así lo crea conveniente), quitando o agregando una más cuando la última palabra del verso es esdrújula o aguda.


"Y no la hallaron Vasco de Gama ni Colón" :

y / no / la+ha/ lla /ron / Vas / co / de / Ga / ma / ni / Co / lón = 13 + 1 (por ser Colón una palabra aguda)


El único verso que no posee las catorce sílabas es el último:


"que él llegó, que él llegó"


Estructura material: Antes que nada quisiera realizar una aclaración con respecto al estilo del escritor. Utiliza una forma semiarcaica para escribir. Como si fuera un castellano antiguo. Por eso vemos palabras inventadas, que en el lenguaje de un nene chiquito serían causa de risa. Por ejemplo: Escrición (funciona como inscripción, es una palabra que no figura en el diccionario de la RAE pero igualmente es utilizada en muchos otros países de habla hispana). Lo mismo ocurre con versos que parece que carecen de una preposición como:


"Rompí todas mis cosas implacable exterminio" :


Pareciera que le falta "en", entre "cosas" e "implacable".

Hay otras palabras, personajes y lugares que quisiera destacar:
Islas Afortunadas: Poetizadas y utópicas. Son llamadas como los Campos Eliseos. Son la misma Jauja.
La flor de la canela: Cosa que se usa para encarecer lo excelente.
Hirsuta e impervia: Áspero y de carácter intransitable.
Folia (folía): Locura.
Braza: Unidad de longitud náutica.
Aldehuela: Villorrio.
Petardista: Estafador.
Bastimento: Barco.
Sísifo: Rey de Corinto, estaba obligado a llevar eternamente a la cima de una colina una piedra, que siempre caía rodando y, por tanto, su esfuerzo debía recomenzar. Ejemplo de perserverancia y constancia.
Caz: Cauce.
Orzando: Dirigiendo la proa hacia la parte que viene el viento.

Y ahora vamos a lo más sustancioso: Al mensaje del autor Como vemos al principio el poeta dice que es una alegoría de un viaje arriscado. Pero ese viaje, ¿Hacia dónde va? Es claro que hacia Jauja (Isla Afortunada). ¿Y qué es Jauja? El diccionario lo asemeja a todo lo que tiene que ver con la abundancia y la prosperidad. Pero en este caso ¿De qué prosperidad estamos hablando? "La imagen de la riesgosa travesía... corporiza el seguimiento incondicional de Jesucristo, y la procura de la Isla de Jauja es análogo a alcanzar la Beatitud o el Cielo para ser un poco más vulgar. Es también semejante a Dulcinea del Toboso por El Quijote.

Todo el poema es una descripción del camino a Jauja y sus peligros:


"Y no la hallaron Vasco de Gama, ni Colón" /

"Si estuviera en el mapa y estuviera a la vista

Con correos y viajes de idea y vuelta y recreo

Eso sería negocio, ya no fuera conquista"


Ni los navegantes más legendarios lograron llegar a ella. Esto habla de lo difícil que es el camino. También el autor hace referencia a lo poco transitado del camino, y al carácter trascendente que tiene. Lo transforma en un viaje épico, lleno de soledad y dificultades.


"Rompí todas mis cosas implacable exterminio" /

"El naufragio es seguro y es la ley del crucero"


Definitivamente hay que dejar todo para alcanzar a Jauja. Similar al "Sígueme" del Evangelio (Mt. 9,9). No se puede llegar sin despeinarse, se requiere el esfuerzo y el coraje. Es necesario entregar todo (naufragio), para lograr todo.


"Las gentes de los puertos donde iba a bastimento

Risueñas me miraban pasar como a un tilingo" /

"Doncellas que querían sacarme a salvamento

Me hacían ojos dulces o charlas de pasión

La sangre se me alzaba de sed o sentimiento

Mas yo era como un Sísifo volcando su peñón."


Lleno de complicaciones está el camino. Arrecian las tentaciones y las burlas de todos.


"Mis galeotes de balde me lloran ¿cuándo, cuándo?

Ni les perdono el remo, ni les cedo el timón.

Este es el viaje eterno que es siempre comenzando

Pero el término incierto canta en mi corazón."


Es un periplo que parece nunca acabar, lo cual lo hace más difícil. Aunque uno se viva preguntando cuándo llegaremos a destino, es difícil saberlo con certeza. Requiere constancia ininterrumpida.


"Muchas veces la he visto, diferentes facciones,

Diferentes lugares, siempre la misma Jauja" /

"Mas desaparecían sus mágicas visiones

Apenas la ardua proa tocaba el malecón." /

"La he visto entre las brumas, la he visto en lontananza

A la luz de la luna y al sol de mediodía"


La Isla Afortunada es como un espejismo. Se la ve, se cree que uno está cerca. Pero siempre se aleja cuando creemos que la alcanzamos.


"Gracias te doy Dios mío que me diste un hermano

Que aunque sea invisible me acompaña y espera

Claro que no lo he visto, pretenderlo era vano

Pues murió varios siglos antes que yo naciera

Mas me dejó su libro que, diccionario en mano,

De la lengua danesa voy traduciendo yo

Y se ve por la pinta del fraseo baquiano

que él llegó, que él llegó."


El final es emotivo, y con un agradecimiento a Dios. El poeta considera al danés Kierkegaard como un hermano y amigo que con sus palabras le facilita el camino hacia Jauja. Y la única manera de hacer eso es habiendo llegado a la Isla.

Concluido el análisis, creemos que el lector debiera interrogarse si él personalmente, ya salió de sus puertos, a procura de la isla Afortunada.


[1] http://hjg.com.ar/txt/lc/biog.html
[2] http://www.mov-condor.com.ar/cristianismoyvida/escencia-del-liberalismo.htm
[3] http://hjg.com.ar/txt/lc/biog.html
http://www.padrebuela.com.ar/pag_res.asp?id=123 (Este trabajo fue fundamental para poder hacer este artículo).

1 comentario:

CHESTERTON dijo...

muy buen trabajo!

G. K.